lunes, 6 de marzo de 2017

Primeros pasos de superación

"Incluso en las circunstancias físicas más duras que nos podamos imaginar, siempre nos pertenecerán nuestros pensamientos y, con ellos, nuestras emociones". ( Mª Jesús Álava Reyes)

En mi caso permití que mis pensamientos se envenenaran por lo que me decían:

A partir de coger la baja empezó " mi infierno personal ", las visitas periódicas a la mutua me acabaron de rematar. Desde el primer momento no me entendí con la médica, su falta de tacto, su manera sutil de decirme que mentía, de que no podía tener ansiedad porque era educada, de que la FM no era para tanto, que no era nada grave, por lo que no podía estar mal por ello, que la ansiedad y la FM no tenían nada que ver...¿Estás de acuerdo con ésto?. Todas estas reliquias que salían por su boca eran como puñaladas en el corazón. Su incomprensión me hicieron caer en un pozo sin fondo, no quería saber nada de nadie, no quería salir de casa, me pasé la primera semana sin salir de la cama.

Pero nuestro cuerpo es muy sabio y te envía señales. Las señales que me enviaban para que reaccionase eran: más ansiedad y mas dolor físico.Me estaba indicando que no podía seguir con esa actitud, que lo único que conseguía era empeorar mi salud y hacer sufrir a mi madre ( que también tiene FM y ya bastante sufre por ello) y a mi novio.

Tardé una semana en darme cuenta de todo ésto e inconscientemente intenté salir de ese circulo vicioso en el que yo sola me había metido. Es ahora cuando me doy cuenta que yo fui la única responsable de caer tan bajo porque yo no puedo controlar lo que los demás me dicen pero si de que manera me afecten y, en éste caso, yo permití que los comentarios de la médica de la mutua me afectaran, comentarios de una persona que ni sabía lo que era la FM ni la ansiedad.

Primera decisión positiva que tomé:

¿Que hice? Ponerme la alarma todos los días a las 8 de la mañana, independientemente de las horas que durmiese, me levantaba y me iba al sofá a ver la televisión. Una vez despierta ya no me volvía a dormir, mi ansiedad me lo impedía. De esta manera poco a poco, y sin darme cuenta, tenía un horario normal.

Evidentemente hubo un motivo que me hizo tomar ésta decisión, mi novio. Si por la noche no dormía y por el día si, no podía disfrutar de su compañía.

Segunda decisión positiva que tomé:

Dos meses después de estar de baja cada día me encontraba peor, ponía la televisión pero realmente no la veía. Únicamente estaba pendiente de mis pensamientos negativos y mi dolor físico: de todo lo que me había pasado, lo que me estaba pasando y lo que me iba a pasar. Yo misma me hacía una película mental sobre mi futuro, película tremendamente catastrófica. No disfrutaba de nada en absoluto. Todo esto hizo que mis dolores incrementasen muchísimo.

¿Que decisión tomé? Buscar algo que mentalmente me tuviese entretenida.  ¿Que fue? Opositar nuevamente. Volver a estudiar fue una gran terapia para mi, siempre me ha gustado estudiar y aprender cosas nuevas.

Un grandísimo logro del cual no era consciente en aquel momento, no era capaz de verlo como algo positivo que yo misma había decido. Mientras estudiaba estaba tranquila, tenía mi mente centrada únicamente en los apuntes y no pensaba en cosas negativas. Evidentemente mi concentración no era del 100% y mis películas mentales volvían cada dos por tres teniendo que dejar de estudiar y tumbarme. Sin embargo, sin darme cuenta, poco a poco, fui cogiendo la rutina, me levantaba con ilusión y cada día pasaba más horas estudiando.

¿Que te quiero contar con ésto?

La mayoría de las personas que padecemos FM, no todas, nos centramos tanto en nuestros dolores físicos, en nuestro agotamiento y nuestras limitaciones, e inconscientemente nos creamos una película mental tan irrealista que nos la llegamos a creer y vivimos en ella. Lo único que conseguimos es empeorar, aún más, nuestra salud y olvidarnos de vivir.

Consejos:

-Tod@s tenemos una persona por la que luchar: pareja, hijos, padres, amigos...Deja de pensar si te entienden o no te entienden y centratate exclusivamente en disfrutar de su compañía. 

 -Cuando te encuentres en crisis, estés mal, sientas que no puedes con los dolores, que estas agotad@ y no tengas ganas de nada, no centres tus pensamientos en ello. Di para ti mismo "No voy a dejar que esta crisis pueda conmigo", "se que lo voy a superar", "ya he pasado por ésto más veces y he podido con ello, soy una persona fuerte". Después de decirte estas frases, busca algo que te guste y hazlo (escuchar música, ver una película o serie, pintar, leer... lo que te guste). No permitas que tus pensamientos negativos se apoderen de ti. 

Nuestros pensamientos son los que generan nuestra emociones, y éstas, las que nos hacen actuar de un modo u otro.

Nuestros pensamientos ejercen un gran poder en nuestra vida. De ti depende como deseas vivirla. ¿Con pensamientos negativos y sufriendo más de lo necesario?  ¿Con pensamientos positivos y disfrutando de la vida? Tu eliges.

Yo finalmente opté por aprender a ser positiva y disfrutar de la vida. Ahora me digo a mi misma: " tengo FM, tengo dolores, pero lo más importante es que estoy viva y decido disfrutar la vida" 

Te voy a enseñar cada paso y técnicas que utilicé para llegar a pensar y actuar de ésta manera.


Y no lo olvides... Nunca pierdas tu sonrisa.

No hay comentarios: